En días tan importantes para la historia política argentina en que se evoca la memoria de Leandro N. Alem y de Hipólito Irigoyen, los radicales deben renovar su bandera de fe en los ideales fundantes y en los principios rectores de una causa republicana de hondo contenido popular, cuya vigencia y defensa, en estos tiempos, más que nunca, se hace un deber moral.

El Comité de Circuito de la UCR, la Juventud Radical y los distintos órganos partidarios de Las Breñas llevan a conocimiento de la opinión pública su profundo malestar a las formas y métodos en que, desde las altas esferas del Gobierno Nacional, se definió la visita del Sr. Presidente de la República al Sudoeste Chaqueño. Este hecho, significativo por cierto, no era conocido por los cuadros partidarios de nuestra ciudad y por las propias autoridades municipales, donde la U.C.R., parte integrante de la Alianza Nacional gobernante, administra sus destinos desde hace prácticamente 20 años.

Los militantes, los luchadores de siempre y aquéllos que ejercemos responsabilidades circunstanciales no podemos estar ausentes ni descuidar el compromiso que invocamos al poner en marcha los valores de nuestra doctrina y los principios de nuestra profesión de fe en las acciones de gobierno.

Somos el legado de antiguas luchas, de profundas convicciones de hombres de la talla de Leandro N. Alem, Hipólito Irigoyen, Crisólogo Larralde, Ricardo Balbín, Arturo Ilia y Raúl Alfonsín, que levantaron las banderas de la unión nacional sin claudicar jamás en el significado que la UCR tuvo y ha de tener en cada proceso de transformación, siempre al servicio de las grandes mayorías.

En momentos difíciles como los actuales, el silencio partidario de la dirigencia huele a complicidad y pone en riesgo la confianza de quienes siempre se hallan firmes en la trinchera de los desafíos electorales donde participan los hombres y mujeres del radicalismo.

Celebramos siempre la visita de un Presidente a la provincia, pero advertimos en la necesidad de fortalecer canales de comunicación con nuestro partido político. En el Chaco nadie debe olvidar que la UCR es columna vertebral de “Cambiemos�, alianza que tiene a su cargo el gobierno nacional que conduce el Presidente Macri. Por lo tanto, nuestra identidad partidaria no debe soslayarse, ni los voceros confundir.

Estamos convencidos que el respeto y las reglas protocolares que deben regir acciones y decisiones de la envergadura de una visita presidencial, no se han dado, y se suman a actitudes similares que se vienen repitiendo a lo largo de esta gestión presidencial.

La U.C.R. ha sido una protagonista fundamental en la estructura electoral que posibilitó “acceder� a la conducción de la República por parte de quienes hoy rigen su destino. No obstante ello, debemos decirlo con fuerza, que muchos de los emprendimientos y políticas implementadas desde la Nación, no están en correspondencia con el rol, que hoy se le asigna a nuestro partido político y al accionar de quienes hoy nos representan.

Creemos profundamente en el diálogo y en la búsqueda de consensos que se direccionan a dar respuestas, a las muchas demandas que plantea la sociedad del país. El camino no es bajo ningún concepto ignorar el aporte y el cometido que a lo largo de su rica historia ha venido haciendo el radicalismo desde siempre.

La U.C.R., hoy más que nunca, reivindica su cometido trascendente en la vida de la República e irá haciendo como lo ha hecho a lo largo de los tiempos, todos los esfuerzos que ayuden a construir una Nación más justa para todos.

Debemos recordar que la UCR no es un playón de estacionamiento, mucho menos un escenario fácil para el confort de algunos. La UCR no nació para alimentar aspiraciones personales ni para tener ni mantener, en el sillón de algún gobierno, funcionarios que aplaudan todas las políticas, aún aquéllas que atentan contra los principios fundantes de nuestro partido.

En esta hora de alianzas, es importante que reconozcamos la necesidad de que ningún compromiso, por más orgánico que el mismo sea, se permitirá poner por encima de las banderas que la UCR no puede negociar. La hora nos exige actitud y coraje. “No estamos contra nada ni nadie, sino con todos y para el bien de todos�

COMITÉ DE CIRCUITO U.C.R LAS BREÑAS