Se trata de un pequeño aparato al que los investigadores definen como superior al dispositivo "Pandora" que permite clonar llaves electrónicas, interferir señales y hasta copiar tarjetas.

Su hallazgo ha generado asombro y preocupación, en dosis iguales, entre los investigadores policiales en Córdoba. Por primera vez en la provincia, en medio del megaoperativo que se desarrolló la semana pasada para desbaratar a una poderosa organización dedicada al robo de vehículos, se halló un pequeño aparato electrónico que es capaz de generar un inmenso daño.

Se trata de Flipper Zero, un dispositivo que comenzó a desarrollarse en 2020 y que sólo lleva poco más de un año en el mercado mundial, que aún es de venta libre, y que, en las manos equivocadas, representa todo un desafío para la seguridad ciudadana.

En términos generales, se lo puede describir como un pequeño aparato, similar a un llavero, que es capaz de leer, copiar y emular a diferentes objetos electrónicos: llaveros, controles remotos y tarjetas, sobre todo.

El hallazgo se produjo el miércoles de la semana pasada en medio del megaoperativo bautizado como "Operación Fénix".

De acuerdo a la investigación que comenzó en su momento el fiscal provincial Rubén Caro, y que luego continuó en el fuero federal Maximiliano Hairabedian, en la provincia operaba desde hacía bastante tiempo una banda conformada por diversas células que no necesariamente se conocían entre sí, pero que estaban coordinadas por las mismas cabezas.

Una investigación que fue bautizada como "Operación Fénix" por las diversas dificultades con las que los pesquisas se fueron topando a lo largo de estos casi dos años que llevaron detrás de los ahora detenidos.

En total, el fiscal Hairabedian ordenó la imputación de 66 personas: 44 de ellas fueron capturadas en 114 allanamientos simultáneos con epicentros en los barrios Villa El Libertador y villa La Tela, de la Capital cordobesa, además de localidades del interior provincial, la ciudad de Ceres, en Santa Fe, y Salta.

Las figuras del Código Penal son múltiples: robo, contrabando, lavado de dinero y, sobre todo, asociación ilícita. Y no se descarta alguna vinculación con el narcotráfico.

Fue en uno de los allanamientos, en un domicilio de barrio Ferreyra, donde apareció el pequeño Flipper Zero que ahora genera asombro entre los investigadores.

Allí fue capturado uno de los principales investigados en esta causa. Un sujeto acusado de "levantar" autos en la vía pública, pero que lejos estaba de ser un mero ladrón en el organigrama de la investigación. "Es uno de los cerebros, alguien muy inteligente", apuntó un informante.

A través del soporte de señales infrarrojas, con solo acercarlo a una distancia prudente, este dispositivo es capaz de copiar los códigos electrónicos de los llaveros de autos, de portones automáticos e, incluso, las ondas que permiten intervenir las frecuencias las alarmas.

En las redes sociales, sobre todo en TikTok y YouTube, según ya han rastreado los sabuesos policiales de la división Sustracción de Automotores y de Investigaciones Criminales de la Policía, hackers aficionados de diversas partes del mundo muestran cómo gracias a este pequeño aparato han logrado alterar los letreros de las estaciones de servicio, o cómo abren garajes o sustituyen a los distintos comandos a distancia de una casa.

Todo lo que funciona con un código electrónico, sostienen, puede ser copiado y alterado gracias a este dispositivo que tiene un alcance de 50 metros.

Significa, en términos de (in)seguridad, un escalón por encima de Pandora, el dispositivo descubierto el año pasado en Córdoba que ya significaba toda una bisagra delictiva en la provincia. Este aparato permite "robar" el código de otro llavero electrónico, con solo ponerlo cerca. Siempre, vehículos de alta gama, que vienen de fábrica con todo el sistema de apertura y encendido electrónicos.

Ahora, los policías cordobesas aseguran que Flipper Zero es mucho más que el Pandora, ya que permite clonar diversos dispositivos electrónicos, más allá de las llaves de los vehículos.

Tanto el diseño como la venta del Flipper Zero nacieron bajo un amparo legal. La idea de la empresa colaborativa estadounidense Kickstarter fue desarrollar un aparato capaz que sintetizar diversos componentes electrónicos en un sólo dispositivo, como una suerte de salvoconducto para aquellos que puedan perder una llave o un control remoto, por ejemplo. E incluso, para poder medir aquellas falencias que tienen las firmas en cuanto a la ciberseguridad, para buscar potenciales soluciones.

En la mayoría de las grandes plataformas de venta digitales hoy es simple encontrar algún Flipper Zero promocionado para su comercialización inmediata, aunque su precio actual hace que todavía no sea un objeto masivo entre los delincuentes locales.

No obstante, ya hay países como Estados Unidos y Brasil que han comenzado a controlar los contenedores en los que viajan estos dispositivos de una parte a otra del mundo. Y gigantes del mercado virtual, como Amazon, que han restringido su oferta.

También se sabe que, por ejemplo en el caso de los automóviles, en algunas situaciones el Flipper Zero sólo sirve para generar una copia que se puede usar en una única ocasión. Luego, ya hay que volver a clonar la señal para emular de nuevo al llavero original.

No obstante, para la mayoría de los modelos de llaves electrónicas de los rodados en Argentina, a los delincuentes les basta con hacer una sola copia para poder utilizarlo de manera indefinida, según apuntaron los investigadores cordobeses.

En Córdoba, todo aún está en el terreno de la exploración para los investigadores. ¿Ante qué se están enfrentando realmente? Ni ellos ni el fiscal federal Hairabedian, quien encabezó el "Operativo Fénix" hace una semana, dudan de que el que desafío que supone el Flipper Zero es realmente inmenso.
Fuente: Cadena3