La estrategia es clara: "tenemos que estar preparados para lo que pueda venir". "Queremos tener suficiente grano como para aguantar tres meses de consumo"

Noruega es uno de esos países que ha sabido prosperar a través de sabias decisiones, alcanzando grandes consensos y obteniendo buenos resultados. Su gestión del petróleo avala esta teoría. Por ello, sus decisiones siempre deben ser observadas, estudiadas y en algunos casos imitadas. Pues bien, como si las diez plagas de Egipto estuvieran a punto de llegar a Europa, el Gobierno de Noruega ha firmado este martes un acuerdo para comenzar a almacenar cereales. El Gobierno ha asegurado que este plan obedece a la estrategia para protegerse de eventos potenciales que puedan romper las cadenas de suministro o generar fuertes incrementos de precios en alimentos básicos.

El propio Gobierno ha citado algunos escenarios como el de la pandemia del Covid-19, una posible guerra en Europa o el cambio climático para argumentar este movimiento que resulta un tanto alarmante, forma parte de la última decisión tomada por un país que pretende asegurar su futuro ante posibles eventos disruptivos. La acumulación de oro se ha convertido en la decisión más sonada ante el impacto que está teniendo sobre el precio del metal precioso y por los protagonistas de este movimiento, sobre todo China. No obstante, la acumulación de cereal es una vieja estrategia implementada a lo largo de la historia cuando se avistaban nubarrones en el horizonte.

El trigo pertenecerá al Gobierno de Noruega

El acuerdo para almacenar 30.000 toneladas de cereales en 2024 y 2025 fue firmado por el ministro de Agricultura y Alimentación, Geir Pollestad, el ministro de Finanzas, Trygve Slagsvold Vedum, y cuatro empresas privadas. El trigo, que pertenecerá al gobierno noruego, será almacenado por las empresas en instalaciones ya existentes en todo el país. Tres de las empresas almacenarán este año al menos 15.000 toneladas.

Las empresas "son libres de invertir en nuevas instalaciones y decidir por sí mismas dónde quieren almacenar el grano de emergencia, pero deben ponerlo a disposición del Estado si es necesario", ha asegurado el gobierno. El Ministerio de Agricultura y Alimentación de Noruega señaló que "la acumulación de una reserva de cereales alimentarios para contingencias consiste en estar preparados para lo impensable".

"Debería haber un nivel adicional de seguridad en caso de grandes perturbaciones en los sistemas de comercio internacional o fracaso de la producción nacional", ha señalado Slagsvold Vedum. "Esta es una parte importante del trabajo del gobierno para fortalecer la resistencia nacional".

Para sobrevivir hasta tres meses

Es interesante analizar estos movimientos cuando nacen en naciones prósperas y avanzadas como Noruega, que en muchas ocasiones han sabido anticiparse al futuro con políticas de largo plazo. Noruega, con una población de poco más de cinco millones de habitantes, ha logrado alcanzar un nivel de bienestar y prosperidad envidiable, gracias a una combinación de decisiones políticas astutas, una economía robusta y un enfoque en el bienestar social y ambiental. Noruega es el cuarto país con mayor renta per cápita de Europa.

Con todo, la estrategia de Noruega ha empezado ahora, pero el objetivo es acumular cereales durante un tiempo. El grano es un producto que aguanta bien si se conserva en el lugar adecuado y que es la base de la alimentación del ser humano. El objetivo es tener unas 82.500 toneladas de cereales almacenadas para finales de la década "para que luego tengamos suficiente grano para tres meses de consumo por parte de la población de Noruega en una situación de crisis que pueda surgir", aseguró Pollestad a la emisora noruega NRK.

La economía noruega es un modelo de éxito en la gestión de recursos naturales y ahora también lo quiere ser en la gestión de suministros ante posibles eventos catastróficos. A pesar de ser conocida principalmente por su abundancia de petróleo y gas, el país ha diversificado su economía para incluir sectores como la pesca, la energía hidroeléctrica, la tecnología y la industria de alto valor añadido. Sin duda, su política más exitosa ha sido la creación del Fondo de Pensiones del Gobierno de Noruega, comúnmente conocido como el Fondo Soberano Noruego, es uno de los más grandes del mundo, con activos que superan los 1,3 billones de dólares. Este fondo, alimentado por los ingresos del petróleo, ha sido gestionado de manera prudente y transparente, asegurando la estabilidad económica a largo plazo.

Desde el descubrimiento de petróleo en el Mar del Norte en la década de 1960, Noruega ha implementado políticas estrictas para la gestión de estos recursos. La creación del Fondo Soberano en 1990 permitió que los beneficios del petróleo se invirtieran en el futuro del país, evitando la 'maldición del petróleo' o 'mal holandés que ha afectado a otras naciones ricas en recursos.

Además, Noruega ha sido pionera en la adopción de tecnologías limpias y en la promoción de energías renovables. El país es líder mundial en la producción de energía hidroeléctrica y ha hecho grandes avances en la electrificación del transporte, con una alta adopción de vehículos eléctricos.